Para ella Toda Una Vida Llorando...
Todas esas palabras que en silencio se callaron
Y quedaron escondidas en el corazón llenándolo de emociones.
Con las piernas temblorosas, daba pasos indecisos.
Cada error una tortura, cada decisión una y mil dudas...
Sin saber que hacer, sin saber como hacerlo
Escapaba de la realidad por miedo a equivocarse,
Huía como cobarde de las consecuencias de sus propios actos.
Gritando ¡¿Por Que?! Aun sabiendo la respuesta.
Derramando Lagrimas hipócritas y negando la realidad
Ella llega al punto de no querer vivir mas...
La sensación de cobardía palpitando en su cabeza
Llena de culpa y dolor...
Provoca un grito desesperado de Ayuda Y al no obtener respuesta
rompe en llanto, ese lamento de tanta tristeza.
Al Sentirse tan mal llega a creer que la culpa es de ella...
Toda su vida llorando, por nadie.
Todas esas lagrimas de cristal estallando contra el suelo
Provocando ese rotundo sonido que impacto en el silencio que habita en la sala.
Abre los ojos ella se encontraba sola, encerrada, entre cuatro paredes
Y una soledad sofocante...
Esas palabras crueles que la torturaban Y resonaban en su mente
como grandes deudas que hoy salen.
Vive preocupada sin poder ocuparse, no sabe ni como afrontar la realidad.
Son tantas cosas y a la ves ninguna.
Tanto desperdicio de los sentimientos mas valiosos...
Sin poder expresar las palabras que necesitaba expresar
Y en su intento solo lagrimas brotaban de sus ojos
Y ninguna palabra se emite de sus labios.
En ese cuarto solo, vació y sin sentido, llorando junto a un bisturí.
A punto de tomar la única decisión que para ella era la única que valía la pena
Para poder terminar con todo el sufrimiento que acumulo su corazón
Tanta oscuridad invadía la sala., tanta soledad.
Llena de nervios titubeaba sin saber que hacer.
Y pensó "Tan Cobarde Hasta Para Ser Cobarde".
Arrinconada por miedo a esa oscuridad aterradora llena de desesperación
por esa decisión que tomo pero no aplico por miedo a cometer un error.
Tantas lagrimas derrochadas que yacen ahora en el suelo.
Se han vuelto involuntarias, las lagrimas caían solo por caer Ya de una manera
se volvió como una costumbre que ni ella podía detener.
Llena de esos recuerdos que la perturban y no la dejan vivir con plenitud,
Esa tristeza que abunda en sus días con la única necesidad
de una sonrisa que le de por lo menos un segundo de felicidad.
Seria tan caradura por pedir eso... "Un Segundo De Felicidad"
Ni ella lo merece. Avergonzada de si misma no cree siquiera ser digna de vivir...
Teniendo tantas cosas, habiendo tantas maneras de salir adelante, pero no.
Su cabeza terca, Su cuerpo inútil y Su corazón roto, nunca harían nada bueno -
pensó ella sin saber como salir adelante sola.
Atrapada en su mente intentando escapar.
Ya no importa mas nada si nada vale, ni ella misma.
"Deberías Amarte A Ti Misma" le decían y en el intento, todo empeoro.
Esas lagrimas derrochadas por una persona que ni siquiera merece
por lo menos tener algo de tal valor.
Toda su vida se baso en sus lagrimas, en ese llanto desesperado de ayuda y compasión.
Se apoyaba en los demás para levantarse y ella sola se volvía a tirar.
Para que pedir algo que no mereces.
Solo había una pequeña luz de esperanza que la detenía para dar el siguiente paso.
Y esa era una persona que jamas la dejo, esa persona que nunca la abandono,
aunque esa persona no la comprendía, no supo entender por que la chica lloraba tanto,
por que no podía por lo menos dar un paso sin tambalearse y tropezar.
Pero la chica solo quería una sonrisa que le devolviera la que ella había perdido
junto a todas esas lagrimas de cristal que el chico le había recogido todo ese tiempo...